Categoría: Personalización

Personalización de objetos

  • Transferir imágenes a lienzo.

    Transferir imágenes a lienzo.

    Vamos hoy con una técnica nueva. Los que tengáis por costumbre ver este tipo de cosas por internet ya la habréis visto, porque parece que se ha puesto de moda últimamente, así que no voy a ser la primera ni la última que explique cómo se hace, pero aquí os cuento nuestra experiencia.

    En este caso vamos a transferir una foto a un lienzo. Habrá quien diga que para qué, si es más fácil ( y seamos honestos, queda mejor) mandarlo a cualquier tienda de fotografía, que casi todas lo hacen, pero se trata de explorar las posibilidades. Ahora ha sido lienzo, pero podría haber sido cualquier material. En madera por ejemplo me viene a la cabeza el cuadro del salto de fe (para los entusiastas de Indiana Jones), pero podría ser cualquier cosa. Y jugando con las pinceladas podemos darle textura y distintos efectos. Esto, como digo, ha sido un primer contacto.

    Empecemos por los materiales:

    – Pincel, brocha, o lo que queramos usar para extender el gel.

    – Gel Medium. Es una sustancia acrílica cuya función es ampliar la capacidad técnica de las pinturas acrílicas, pero en este caso lo que hace es «atrapar el tóner de la imagen» para dejarla pegada en el soporte que elijamos. Se puede comprar en tiendas de manualidades o bellas artes. Lo hay de distintos tipos; mate, brillo, etc, en mi caso el que encontré se vendía específicamente para la transferencia de imágenes.

    – Impresión láser de la foto que queramos pero invertida (ahora veréis por qué). Y en el papel lo más fino posible.

    – Agua.

    – Barniz.

    – Paciencia.

    Impregnamos la imagen con el gel. En mi caso di tres pasadas por recomendación de las instrucciones de uso, (me temo que las instrucciones lo que pretenden es que uses más cantidad de la necesaria) esperando a que se seque entre una y otra.

    En este punto hemos de tener en cuenta que la pasada de la brocha se notará en el resultado final así que a no ser que queramos ese efecto, hay que tener cuidado de no dar las pasadas desordenadamente.

    Ahora las pinceladas las realicé en horizontal. Hay que tener cuidado de que quede uniformemente cubierto y con una capa generosa. Los puntos donde no impregnemos la fotografía perderemos ese trozo de imagen en el resultado final. También podemos jugar con esto, como con el orden de las pinceladas cuando queramos conseguir otros resultados.

    En cuanto hayamos acabado la última capa y antes de que se seque (lo hace muy rápido, al menos el que yo tengo). Colocamos la imagen boca abajo sobre el soporte, de ahí la necesidad de imprimirla en espejo, puesto que la reproducción final será la inversa.

    Extendemos el papel de manera que no queden arrugas ni burbujas. ¿Veis que ahí han quedado unas burbujas? Pues a quitarlas con la mano o ayudándonos de una esponja o trapo. Si no, en esa zona del lienzo perderemos la foto.

    Aunque seca en un par de horas, observé que la parte que dejé secar más tiempo quedó mejor, así que si no hay prisa mejor dejarlo incluso un día.

    Ahora es cuando interviene la paciencia. La manera de quitar el papel en el que teníamos la impresión es humedeciéndolo y frotándolo con los dedos hasta que desaparezca. De ahí que en los materiales, haya especificado que el papel debe ser lo más fino posible, aunque las impresiones en láser se suelen hacer como mínimo en papel de 80gr y en buena parte de las copisterías (si no tenéis impresora láser en casa) usan papel de 100gr.

    Creo que se podría hacer más fácilmente imprimiendo en transparencia. Puesto que la imagen se quedará en el medium y el acetato se despegará, pero no lo puedo asegurar, porque que no lo he probado.

    Llegados hasta aquí, tengo que destacar lo mona que iba esta chica vestida de novia…

    Cuando el papel está húmedo es difícil saber si se ha desprendido del todo, así que a pesar de haber estado un buen rato rascando es posible que cuando se seque nos encontremos con un «velo» de papel que todavía sigue adherido.

    Es cuestión de seguir frotando y humedeciendo, al final acaba quitándose. Hay que tener cuidado de no llevarnos también la película de gel con la imagen. Podéis observar en los márgenes izquierdo y derecho de la foto unas imperfecciones porque se levantó la foto y en el centro del vestido hay una parte que no ha pegado bien.

    Podría haber repetido la prueba para hacer un trabajo perfecto y que parezca que a la primera todo es maravilloso. Pero no, este artículo es para mostraros la primera prueba con este material, con sus aciertos y sus errores. Ya que da mucha rabia ver tutoriales de trabajos que salen a la perfección y que luego a uno no le salga igual.

    Eso sí, cuando algo sale mal, hay que intentar sacar provecho, así que para que pareciera que los defectos del pegado eran a propósito, lijé otras zonas de la imagen.

    La idea era dejar los márgenes en blanco, pero quedaban restos del papel y había quedado un poco sucio, así que decidí darle un poco de pintura. (Aunque no creo que fuese un gran acierto).

    Para proteger el cuadro aplicamos un barniz satinado, mate o brillante, según nos parezca, y este es el resultado:

    Os animo a hacer la prueba, en el material que se os ocurra. Se puede hacer, por ejemplo un collage, de forma artesanal, (sin recurrir al Photoshop), y si tenéis niños, seguro que se entretienen un buen rato rascando el papel hasta que ven aparecer la foto, como una calcomanía…pero a lo grande.

  • Letras infantiles

    Letras infantiles

    De vuelta en el nuevo año y con nuevas energías. Empezamos por una manualidad sencilla que poco a poco iremos mejorando para hacer cosas nuevas y como siempre aprender. Aprender «jugando» que es lo que más nos gusta.
    Hace tiempo que no escribimos nada pero ha sido por una buena razón y ahora comienzo escribiendo una entrada cortita que iremos actualizando con el tiempo.
    Estas navidades nos ha traído dos cosas nuevas, la primera y más importante, nuestra hija María, razón por la que se nos ha parado el mundo y entre otras cosas el blog y la tienda.
    La otra, que no por menos importante deja de hacernos ilusión fue la sierra que nos han traído los Reyes Magos, porque era una de esas herramientas que no teníamos y nos venía muy bien, la Dremel Moto Saw.

    Es una sierra de calar muy precisa. Se puede usar «a pulso» o colocada en su soporte en la mesa. Nos viene muy bien este modelo porque es compacto, cosa que por razones de espacio en el taller, para nosotros es muy importante.

    Para estrenarla y en honor a la reina de la casa he hecho su inicial para colgarla en la puerta de su futura habitación.
    La sierra corta madera y metales blandos. Nuestra primera prueba ha sido en madera. Aprovechando que tiene una pieza que sujeta el material a cortar, se puede poner una plantilla encima y cortar por la línea sin tener que pasar previamente el dibujo a la madera, y eso facilita mucho las cosas.

    He cortado la letra en contrachapado de 6mm. Como veis el trabajo no tiene demasiada explicación. Sólo es cuestión de acostumbrarse a guiar la pieza. Con cuidado sobre todo en las curvas. Recomiendo hacer una aproximación por fuera de la línea y repasarla una vez cortada, porque en las curvas muy cerradas corremos el peligro de desviarnos o partir la hoja por forzarla demasiado. (Aunque en realidad la hoja de esta sierra es muy fina y la pieza gira bien)

    Una vez cortada, como a mí particularmente me gusta que se vea la veta de la madera, he optado por un tinte para luego pintar la carita con pintura acrílica.


    La próxima letra que hagamos irá forrada con tela. A ver cómo queda.

  • Grabado al ácido

    Grabado al ácido

     

     

    Vamos probando nuevas técnicas y esta vez le ha tocado al grabado al ácido.

    En principio parecía un asunto más delicado del que ha acabado siendo, pero teniendo cuidado de no manchar donde no se debe y con unas buenas plantillas se pueden conseguir unos resultados muy buenos.
    lass=»yoast-text-mark» />>El líquido que se usa para grabar se puede comprar en tiendas de manualidades, aunque debe ser una bastante especializada, porque es un producto relativamente caro y no todas lo tienen.

    Aquí tenemos unos vasitos en pleno proceso:

    Sobre todo, hasta donde hemos visto hay dos complicaciones más o menos importantes:

    La primera es que como todos sabemos no es lo mismo cristal que vidrio y aún siendo vidrio, no todos son iguales, de manera que los resultados no son los mismos según el material. (Ante la duda, como en todo, mejor si podemos hacer una prueba).

    La segunda es que según qué pieza estemos grabando puede ser complicado poner la plantilla. Si es una superficie relativamente plana no tendremos problema, y una vez pegada la máscara sólo hay que dar una capa uniforme del producto de grabado y dejarla secar.

    Ya seca sólo tendremos que lavarla con agua. También se puede hacer por inmersión, pero a mí me parece una complicación innecesaria, al menos con la marca que yo he utilizado, que es bastante espesa y se queda bien colocada con un pincel.
    Nuestra primera prueba fué un jarrón con el «Árbol Blanco» del escudo de Gondor, de El Señor de los Anillos (para ponerlo junto a nuestro espejo de target=»_blank» rel=»noopener»>Las puertas de Moria</a&gt;)

    Es más problemático en un a pieza tipo vaso. El mero hecho de ser una superficie cilíndrica ya nos hace tener en cuenta la longitud total de la circunferencia, pero además, buena parte de los vasos son ligeramente cónicos, de manera que si pretendemos colocar un dibujo que recorra la pieza entera nos encontraremos que la parte superior de la máscara tendrá un radio diferente a la inferior, lo que nos lleva a deformaciones y arrugas indeseables, puesto que cada arruga es una posibilidad de que el líquido entre por donde no debe y perdamos definición.

    <br class=»yoast-text-mark» />>Hasta donde sabemos, ésto sólo lo podemos solucionar haciendo pequeñas modificaciones en el diseño de la máscara y siendo muy cuidadosos a la hora de pasar el pincel si hay alguna arruga. Pero bien vale un poco de cuidado, cuando el resultado va a ser una cerveza bien fresquita al estilo de la Tierra Media.

    Éste vaso tiene alrededor la inscripción del Anillo Único. Esto es lo que dice en lengua común, en una traducción bastante fiel:

    Un Anillo para gobernarlos a todos. Un Anillo para encontrarlos.
    Un Anillo para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas.

    Una vez aprendido lo básico ya nos podemos atrever con cualquier tipo de personalización, desde iniciales hasta imágenes. Cambiando de saga, nos animamos a hacer un juego de chupitos con los escudos de cuatro de las casas de Juego de Tronos. Los tenéis disponibles en nuestra tienda.